Hola a todos/as!!
Me llamo
Rafael Ruiz Redondo, pero por mi nombre supongo que algunos no me conoceréis, pero si digo que soy Rafalete
todos/as sabréis quién
soy.
Un día me llamó mi amigo Alberto Luna Olid, para comentarme que le gustaría que hiciese un escrito contando
vivencias y anécdotas
que me ocurriesen en el colegio, ya que soy Antiguo Alumno.
Recordé entonces
unas cuantas y ya que estamos en el mes de MARÍA, aprovecho para recordar algunas de cuando llegaba Mayo en el Colegio, este mes es una explosión de alegría en nuestro Colegio,
vivencias de cabalgatas, novenas, procesiones, etc. que quedarán
siempre en mi memoria
de Alumno Salesiano.
En la cabalgata me he disfrazado de todo, de camarero, de torero, de bailarina
y siempre con mi fiel compañera y amiga Anabel García, con la que comparto un enorme sentimiento a todo lo
que suene a Salesiano, aunque los años hayan pasado.
Un año en la cabalgata, me vestí de bailarina, iba caracterizado con mi maquillaje, peluca, vestido… ¡imaginaros como iría que no me conoció ni mi padre que nos estaba esperando en el colegio!, una vez terminada, había que ir a la novena y entonces me quité la peluca y toda la ropa y me puse el Alba para acompañar a D. Abel Medina de monaguillo, pero se me olvidó…¡quitarme el maquillaje! Imaginaros un monaguillo con los ojos pintados de azul y los labios rojos… D. Abel que se percató de cómo iba, no podía aguantar la risa ni dejar de mirarme, así como muchos de los participantes en la novena de aquel día, entre ellos mis padres, que no paraban de hacerme gestos para que me limpiara, pero cada vez que lo intentaba el resultado era todavía peor, cuando terminó la Novena ¡mi cara era un cuadro!.
Me despido
animándolos a asistir a la fiesta de la Unión, donde compartimos miles anécdotas y vivencias en nuestro colegio
y con toda la familia
salesiana.
Un abrazo, Rafalete.
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